domingo, 17 de mayo de 2009

PERSEVERANCIA

PERSEVERANCIA
Educación Trascendente # 460
Mayo 17, 2009
Manuel Rodríguez Salazar

Esta semana impartí la clase de “Empowerment” a la sexta generación de la maestría en Liderazgo de la Universidad Virtual Liverpool. Es una clase de tres días a tiempo completo, lo que favorece que los alumnos se concentren en el tema, además, de que deben llegar habiendo estudiado material sobre el asunto para aprovechar lo más posible el tiempo “presencial”.

En esta ocasión hice más énfasis que en años anteriores respecto a que el factor crucial, el “disparador”, para llegar a ser un líder inspirador / transformador es el crecimiento como ser humano. Avanzar en la superación personal significa una lucha de por vida y demanda cualidades que no son usuales, como perseverancia y disciplina. Redondeo lo peculiar de la clase con cuestiones como que el amor es un ingrediente esencial del liderazgo, como también lo son la integridad y la comunicación responsable en todo momento.

Consciente – por propia experiencia – de que la vorágine del día con día “ayuda” a postergar e incluso a olvidar los propósitos que nos fijamos en algunos talleres o cursos, se me ocurrió proponer a los alumnos integrar un grupo “virtual” para ayudarnos a cumplir metas individuales, especialmente las de superación personal. Aún no tengo idea precisa de qué haremos pero sí de que, logremos lo que logremos, será una experiencia interesante.

Lo que sí mencione a mis jóvenes amigos es que la condición para incorporarse a este grupo es el compromiso de cumplir – pase lo que pase – con las normas que vayamos acordando en el trayecto, que incluirán hacer las “tareas”.

Al escribir lo anterior se me ocurrió que nuestro primer trabajo podría ser describir o hacer una lista de las razones por las que, en el pasado, no hemos logrado todos nuestros objetivos o metas personales. Me imagino que analizar las respuestas de esa primera tarea producirá información valiosa que nos ayudará a definir cómo enfrentar esos obstáculos en el futuro.

Como perseverancia será un tema rutinario a comentar en este grupo virtual, encontré frases relevantes que, a mi juicio, encierran enseñanzas extraordinariamente valiosas. Empiezo por lo que dijeron autores desconocidos:

“Nadie se tropieza con montañas. Son las pequeñas piedras las que nos hacen tropezar. Pasa por todas las piedras en el camino y habrás cruzado la montaña.”

“El roble más grande fue una vez una pequeña nuez que se aferró a la tierra”.

“Si caes siete veces, levántate ocho.” Proverbio japonés.

“No puedes ir por la vida dejando todo a medias. Si quieres alcanzar un logro, tienes que perseverar en algo.”

“No te desanimes. Frecuentemente la última llave del manojo es la que abre la cerradura.”

“Puede que no esté ahí todavía, pero estoy más cerca que ayer.”

“Las cosas difíciles requieren un tiempo largo. Las imposibles un poco más.”

“No te asuste dar lo mejor de ti en lo que parezcan trabajos pequeños. Si haces bien los trabajos pequeños, te harás más fuerte y los trabajos grandes tenderán a cuidarse ellos mismos (o no los veremos tan difíciles, digo yo).” Dale Carnegie

“No es que yo sea tan listo, sino que me mantengo más tiempo con los problemas.”
Albert Einstein

“La perseverancia no es una carrera de distancia. Son muchas carreras cortas, una tras otra.” Walter Elliot

“Las personas siempre están culpando a las circunstancias por lo que son y/ o no logran.
No creo en las circunstancias. Quienes salen adelante son los que al levantarse ven las circunstancias que quieren y, si no las encuentran, las crean.” G.B. Shaw

“Las gotas de lluvia hacen un hoyo en la piedra no por violencia sino por continuar cayendo.” Lucrecio

“Si estás encaminado en la dirección correcta, todo lo que tienes que hacer es continuar caminando.” Proverbio Budista

“Los santos son pecadores que mantuvieron el paso.“ Robert Louis Stevenson

“Nuestra mayor gloria no es nunca haber caído, sino levantarnos cada vez que fallamos.”
Ralph Waldo Emerson

“Los problemas no son señales para detenernos, son simples señalamientos.”
Robert Schuller

“La vitalidad se muestra no sólo en la habilidad para persistir sino en la voluntad para volver a empezar.” F. Scott Fizgerald

“Con talento ordinario y perseverancia extraordinaria, todo es alcanzable.”
Thomas Foxwell Buston

“No dejes que el temor por el tiempo que tomará realizar algo te impida hacerlo. El tiempo pasará de todas maneras, así que podríamos hacer el mejor uso de ese tiempo.” Earl Nightingale

“La mayoría de la gente nunca corre todo lo que podría correr con su primer aire y no se dan cuenta que tienen un segundo aire.” William James

¡¡¡ FELIZ SEMANA !!!

PENSAMIENTOS → HABITOS → CARACTER

PENSAMIENTOS → HABITOS → CARACTER
Educación Trascendente # 455
Abril 12, 2009
Manuel Rodríguez Salazar

Con la intención de escribir sobre el camino espiritual “tropecé” con el extraordinario libro “Character Building Thought Power” de R. W. Trine, escrito en 1899, lo que me llevó a cambiar el tema originalmente pensado.

Escribir sobre el camino espiritual tenía la intención de enfatizar (para mí mismo) la enorme trascendencia de trabajar para vivir mejor, minimizando preocupaciones y malestares mentales que, invariablemente, como todo, se originan en pensamientos. Otro “disparador” para considerar escribir sobre el camino espiritual fue haber concluido diez semanas del “Proceso de la Presencia”, la práctica recomendada por Michael Brown que genera vivir el momento de ahora “de a de veras”. (Experimentarlo ayuda a avanzar en el camino espiritual).

Me he referido con frecuencia a que uno es hoy el resultado de sus pensamientos y al proverbio: “Como piensas en tu alma así eres”. Desafortunadamente, después de convencernos de estas grandes verdades tendemos a no ponerlas en práctica, sumándose a los miles de conceptos inútiles en nuestra memoria.

“Inconscientemente estamos formando hábitos en cada momento de nuestra vida.”

Asociado a lo anterior, R. W. Trine escribe que tenemos el poder de decidir / construir qué hábitos nos incorporamos: “Seré lo que mi voluntad determine”. Los hábitos (buenos y malos) son el ingrediente principal de nuestro carácter: la columna vertebral de quien uno es.

Nuestros pensamientos dominantes determinan nuestras acciones dominantes. Los pensamientos son los “padres” de nuestros actos, hábitos, carácter, vida. Por esa razón es crucial aprender cómo controlar los pensamientos.

La experiencia demuestra que cuando hacemos algo de determinada manera la siguiente vez lo haremos con mayor facilidad, hasta llegar a un momento en que hacerlo ya no nos requiere ningún esfuerzo. Quienes hemos corrido (o intentado correr) un maratón sabemos perfectamente que entre más corremos cada vez podemos correr más. Lo contrario también es cierto, pues entre uno menos hace menos puede.

Paralelamente a lo anterior, entre más se repite un pensamiento con más facilidad la mente lo vuelve a “disparar”… validando la secuela de: “pensamientos → palabras → acciones → hábitos → carácter → destino” expresada, creo, por Tales de Mileto miles de años atrás. Esta secuela, en mi opinión, encierra el secreto para controlar los hábitos. Es decir, si los pensamientos originan palabras y éstas dan lugar a acciones y su repetición a hábitos, controlando los primeros se pueden controlar hábitos, carácter y destino.

Para comprender mejor el proceso de creación de hábitos vale la pena analizar un excelente ejemplo del libro de R. W. Trine aplicable a cualquier hábito y estilo de vida: “Un joven de buen corazón, hijo de familia, se encuentra una tarde agradable con unos amigos, muchachos, como muchos, no muy responsables ni muy conscientes de sus actos. Lo invitan a pasar un buen rato tomando unas copas para divertirse (no a emborracharse, sino a tomar sólo una copas). El inocente joven no presta atención a la sugerencia sutil de su conciencia, que le dice “¡sería mejor no aceptar la invitación a beber!”.

El joven vuelve a tomar unas copas de vez en cuando, pero le va tomando gusto a hacerlo y, a veces, bebe estando solo. Cometió un error frecuente: no hacer caso, no escuchar, A TIEMPO, a su propia conciencia, que le dice que no debía beber con frecuencia, por más que pensara que podría dejar de hacerlo cuando quisiera.

El joven del ejemplo no sabía que la mayor fortaleza – y la nobleza misma de carácter – nace de tomar una posición firme, férrea, sobre lo que uno sabe que es lo correcto, lo que debe ser. (Uno siempre sabe cómo comportarse, en todo momento, sobre los temas fundamentales de la propia vida. Sin embargo, muchas veces preferimos no preguntarnos… porque la respuesta, que adivinamos, no nos gustaría).

Tristemente, llega un momento en que el joven se da cuenta que no puede dejar de beber. Se convierte en uno de tantos millones de adictos a la bebida, que sufren la vergüenza, degradación y angustia que produce el alcoholismo.

¿Tiene este joven alternativa para dejar de ser un alcohólico? ¡Por supuesto que sí! Aún en su desafortunada situación, tiene el poder para dejar el alcohol y volver a ser libre. ¿CÓMO? La próxima vez que le surja el pensamiento de tomar una copa debe ¡descartarlo de inmediato! Contemplar ese mal pensamiento, analizarlo o simplemente considerar si tomar o no una copa, dará lugar a una batalla que perderá irremisiblemente.

Su única alternativa, su única salida, es que en el momento en que surja ese pensamiento ¡lo quite de su mente!, ¡aniquilarlo en el instante mismo en que aparece!

La mejor manera de lograrlo es lo que R. W. Trine llama la “Ley de Cambio de Dirección”, que consiste en substituir un mal pensamiento por uno bueno, completamente diferente. Por algo que acariciemos con entusiasmo o al que demos gran valor como pueden ser nuestros hijos; cristalizar un sueño extraordinario; llegar a tener una vida plena de alegría… “Atacar” un pensamiento negativo en esta forma, consistentemente, tiene un gran poder, pues el pensamiento “substituto” se convertirá en un pensamiento dominante que, eventualmente, creará un nuevo hábito. Es exactamente el mismo proceso con que incorporamos un mal hábito. Al escribir este párrafo recordé el principio de física que dice que dos objetos no pueden ocupar el mismo espacio al mismo tiempo. Es decir, el mal pensamiento no puede permanecer en el mismo espacio cuando entra el pensamiento substituto.

Debíamos adoptar como “regla de vida”: Jamás admitir pensamientos negativos que debiliten nuestro carácter y/o nos encaminen hacia estados de preocupación, de infelicidad o a reacciones inaceptables. Seguir esta regla requiere perseverancia implacable para vigilar permanentemente nuestros pensamientos, pero ¡es un precio muy bajo comparado con los enormes beneficios que podemos recibir! Hagamos una lista de los malos hábitos, características y reacciones que debíamos eliminar y qué nuevos hábitos y maneras de ser debíamos incorporar a nuestra vida y empecemos a trabajar de inmediato para que lo expuesto arriba lo hagamos realidad. Para que esta idea ¡no se quede en otro de tantos conceptos inútiles!

Un carácter noble (“Godlike Character” escribe James Allen en su libro “As a Man Thinked”) no es resultado de la casualidad sino del esfuerzo continuado de pensar correctamente. En el mismo libro James Allen dice: “Las personas están ansiosas de mejorar sus circunstancias, pero no están dispuestas a mejorarse a sí mismas. Por eso no avanzan”.

¡¡¡ FELIZ SEMANA !!!